Como hay una fiebre de hierro, muchos en La Romana se estarán preguntando si alguien estará evitando que se sigan robando las cruces de hierro y las puertas de los nichos de los dos campos santos de esta localidad.
En La Romana se están incluso robando los portones de las viviendas y convertidos en chatarras para ser vendidos a los que tienen el negocio d e compra de hierro.
Mientras que como se sabe que en los cementerios se lo roban todo hasta los velones y los ramos de flores que les llevan los dolientes a sus fallecidos.
Sin embargo la pregunta sigue siendo oportuna, estarán vigilando los cementerios de La Romana para evitar que los ladrones despeguen las cruces y todo lo que sea d e hierro para convertirlo en dinero en los centros existentes, los cuales son desconocidos por las autoridades que deben intervenirlos y llevarse preso a todo el que hace ese negocio porque son los principales cómplice del gran negocio en que s e ha convertido esa acción ilícita pero que permiten que siga su agitado curso.
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